Te derrumbaré con mi silencio.
Te ahogarás en mi mirada.
Agotaré tu paciencia.
Enfureceré a tu porvenir...
Aniquilaré tu entendimiento.
Te asesinaré con la duda.
Te fortaleceré en tus errores.
Te asfixiaras en tu propio llanto...
Te enamoraras de la pena.
Odiaras la luz del sol.
Sentirás la decadencia.
Fracasarás en la esperanza...
Haré de tus miserias, tu único modo de vida...
Y concluyó, levantando sus manos y mostrando una sonrisa seca:
- "Unamos nuestras manos por la ira... Nuestra única misión es la destrucción. Tallemos en nosotros la fealdad".
Un fuego alumbró su mirada y escupiendo dijo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario